
Líder, aunque no le guste esa definición (ver aparte), el Pelado no ocultó su satisfacción por el 3-1 del domingo. Pero sobre todo por el reconocimiento de los hinchas. "Estábamos en deuda con la gente. Por eso fue una alegría irnos aplaudidos", aclaró. Y con la misma sonrisa, explicó por dónde pasa su ideal. "Lo más importante es el próximo partido, ante Godoy Cruz. Hay que seguir así para poder irnos tranquilos de vacaciones".
Aunque el calendario marque 44 días, Almeyda asegura que aún falta un montón para el 2010. Mucho más para saber qué será de su vida. Y aunque en Núñez es prácticamente imposible encontrar a alguien que lo quiera retirar otra vez, el volante no dio nada por sentado. "Los dirigentes deben decidir si sigo o no. Yo quiero quedarme, pero no está en mis manos". Reforzar el equipo, claro, tampoco es una de sus facultades, pero sí una necesidad para Matías. "Seguro que se van a hacer incorporaciones. Siguiendo la línea de este cuerpo técnico, en el próximo torneo vamos a pelear arriba. Y para eso tiene que llegar un goleador", avisó y, casi como un ruego, plantó posición sobre la probable venta de Buonanotte. "A mí me gustaría seguir jugando con él. Es uno de los mejores jugadores que ha sacado nuestro país en el último tiempo y uno de los mejores del campeonato. Habrá que ver qué piensa Diego, pero ojalá que lo podamos disfrutar un poco más".
Fuente: Diario Olé
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