Está lesionado, es verdad, pero la dolencia no es grave y por eso Matías Almeyda festeja. El capitán de River se lastimó la rodilla y estará al menos un mes alejado de las canchas. Almeyda confesó que lo angustiaba la posibilidad de ir al quirófano. "Pisé en falso, la rodilla se me fue para atrás y sentí que algo raro había", afirmó el volante, que además sufrió un desgarro en el bíceps femoral izquierdo el domingo, durante el partido con Quilmes.
"La verdad es que recé para que no me operaran", reveló el caudillo de Núñez, y luego tocó el tema del clásico con Boca, en la fecha 12 del Apertura. "Es un partido que todos queremos jugar. Yo ya estoy trabajando para estar listo lo antes posible", apuntó. "Ahora me toca apoyar al grupo desde afuera", sostuvo el volante central que, de paso, dejó un mensaje de calma a los hinchas de la "banda".
"Para dejar de jugar me van a tener que romper las dos piernas", bromeó el "Pelado". Ayer comenzó con los trabajos kinésicos de recuperación (había llegado en muletas al entrenamiento en el estadio Monumental). "Hoy empiezo a empujar desde afuera. Confío a muerte en mis compañeros, va a salir todo bien", remató.
Fuente: lagaceta.com
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¿Así que van a tener que cortarte las dos piernas para que dejes de jugar?...¡A mí val a tener que cortarme las dos manos para que te deje de aplaudir!...VAMOS,LEÓN!!!almamillonaria.
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